Un día tiene 24 horas y si siempre ha sido así, entonces por qué ahora tengo la impresión de que mi día no tiene ni 22 horas. La neurociencia ha estudiado este proceso, pero no ha llegado a darnos una explicación lógica. Es cierto que la percepción del tiempo cambia conforme nos hacemos mayores, ya lo decían nuestros abuelos “ Aprovecha que a partir de los 30 el tiempo vuela” ¡qué razón tenían!En esas 22 horas de percepción, tenemos que dormir, desplazarnos, trabajar,contestar a los whastsapps (dentro de un tiempo razonable por el bien de nuestra amistad o pareja) ducharnos, cocinar, estudiar (quién además estudie), ir al gym, gestiones varias...y yo me pregunto, ¿cuánto tiempo dejamos para pensar en nosotros mismos?¿cuánto tiempo dejamos para hacer cosas que realmente nos gustan pero que igual ni sabemos que nos gustan porque no hemos “tenido” tiempo de pensarlo?
Hace un año estaba en clase de inglés, cuando el profesor lanzó la típica pregunta:
“¿Cuáles son tus hobbies?” y el chico que estaba a mi lado dijo:
“ I would like to play tennis” “ If I could I'd like to learn dance”
Y el profesor le preguntó:
¿”Por qué utilizas el condicional para expresarte”?
Y el chico contestó:
“ Porque eso es lo que me gustaría hacer, pero por una cosa o por otra no lo puedo hacer y al final me acabo olvidando de mis hobbies,” Y me pareció muy triste pero a la vez muy común...

El ritmo que nos impone la sociedad al día de hoy es frenético y nos queda poco tiempo para hacer lo que nos gusta o simplemente para pensar en nosotros mismos y cambiar algunas cosas; No obstante el día tiene 24 horas y no 22, estoy segura que con esas 2 horas que nos sobran (aunque no seamos conscientes de que nos sobran), se pueden hacer grandes cambios.Pero hay que tirar muy fuerte de las riendas para que esas 2 horas tengan un papel protagonista en nuestra vida y no caigan en el olvido día tras día, mes tras mes, año tras año, década tras década...